No es la primera vez que el Club de Corredores se explaya sobre los corredores sin dorsal durante una carrera organizada oficialmente por ellos. Pero esta vez dio un paso más y decidió advertir que tomará acciones contra todos aquellos que corran una de sus carreras sin estar inscriptos. Esto abre un nuevo debate al respecto. 

Según informaron, la empresa encargada de organizar competencias como El Cruce, la mítica carrera Maya o las carreras de las estaciones, entre otras tantas, indico que el número de corredores sin dorsal por carrera es de entre un 25% y un 30%, y dicen que esto implica un problema ya que se trata de personas que ante cualquier inconveniente que pudera suceder, al no estar inscriptos no tienen cobertura del seguro del evento.

Es por este motivo que afirmaron: “quienes estén registrados en nuestra base de datos como participantes sin dorsal no podrán inscribirse en futuras carreras, y aquellos que lo hagan se les reembolsará el dinero pagado en el momento de la acreditación, tanto para las carreras en la calle como para las de aventura”. Y agregaron que si alguien pertenece a un grupo de entrenamiento al que le brindan beneficioss, lo retiraran de la base y ese grupo dejará de recibirlos.

Los defensores de los corredores sin dorsal

Del otro lado de la mesa se encuentran los corredores que corren todos los fines de semana por los mismos lugares por los que las empresas organizadoras hacen sus carreras que se muestran en contra de esas decisiones y las catalogan de “autoritarias”. La frase con la que todos se defienden es unánime: “la calle es vía pública y como tal cualquier tiene derecho de circular libremente”, advierten varios corredores y corredoras amateurs. Pero también explican que muchas veces lo hacen para acompañar a corredores con discapacidad, sin usar los servicios de la carrera y sin meterse en la manga final que lleva al arco.

 

 

Corredores son dorsal acompañando a un atleta con discapacidad.

La postura, en parte es verdad. Y decimos en parte porque en realidad la ley prohíbe a las personas correr o caminar por la calle. Pero ese no es solo el problema sino los abusadores que aprovechan el evento y hacen uso de los servicios que la organización dispone para el corredor como los puestos de asistencia con agua, geles o frutas que hay en el circuito.

Lo cierto es que el Club de Corredores decidió dar el primer paso. Y no sería raro que lo sigan el resto de las organizaciones. Y, además, las sanciones que plantean, al tratarse de un evento organizado por una empresa privada, tendrán el derecho de imponer las sanciones sin inconveniente. Y con los software de reconocimiento facial hoy es mucho más sencillo identificar a corredores y corredoras. Igualmente vale aclarar que esto no debería implementarse con aquellos que corran por la vereda como lo hacen todos los fines de semana, porque de ser así entonces se trataría de un abuso que ni corredores ni las autoridades deberían permitir. Habrá que ver cómo avanza y cómo se implementa.

 

 

El comunicado del Club de Corredores

“En esta oportunidad, nos ponemos en contacto, para comunicarles una decisión que hemos tomado respecto a las carreras que organizamos y esperamos contar con su apoyo en esta iniciativa que no tiene motivaciones económicas, sino que busca regularizar una práctica que debería ser normativa.

Nos preocupa el crecimiento desmedido del número de corredores sin dorsal en nuestras carreras, aproximadamente es entre el 25% y el 30%, lo cual representa un gran problema para la organización.

Es crucial señalar que un corredor sin inscripción está corriendo en la calle sin seguro y sin ningún registro oficial de sus datos.

 Aunque se utilice como argumento la famosa frase con la que muchos quieren escudarse, “la calle es pública” es importante tener en cuenta que:

 –        Correr por las calles está prohibido, excepto cuando una institución obtiene permisos correspondientes para tal fin.
 –        Dichos permisos se otorgan bajo la condición de que cada participante esté registrado, con la documentación exigida presentada y los seguros correspondientes.
 –        Para poder obtener los permisos mencionados, debemos cumplir con obligaciones tales como, servicio de ambulancias y atención médica, contratación de policía, baños, planificación de cortes de calles con horarios establecidos, hidratación para todos los participantes, recursos humanos para la correcta organización, entre otros servicios.

Aunque no podemos evitar que la gente corra por las calles, tomaremos medidas para impedir que participen en futuras carreras organizadas por nosotros.
Quienes estén registrados en nuestra base de datos como participantes sin dorsal no podrán inscribirse en futuras carreras, y aquellos que lo hagan se les reembolsará el dinero pagado en el momento de la acreditación, tanto para las carreras en la calle como para las de aventura.

Si alguien pertenece a un grupo de entrenamiento al que nuestra institución brinda beneficios, lo retiraremos de nuestra base y este grupo dejará de recibirlos.

Consideramos que esta cuestión radica en la conciencia y educación de cada individuo. Es probable que esta medida genere controversias, pero no estamos interesados en debatir sobre ello. Hemos sido educados de una manera que no propicia debates ni discusión sobre este tema.

Es importante destacar que existen carreras gratuitas realizadas por organizaciones gubernamentales y privadas, ¿Sabían que el número de participantes en estas carreras es menor que aquellos que corren sin dorsal en las nuestras?

En países europeos o en Estados Unidos, la participación sin dorsal en carreras representa sólo el 0.5%, en comparación con el 25 o 30% que observamos en Argentina.

Agradecemos su comprensión y para aquellos que quieran generar controversias con este tema, lejos estamos de entrar en esta discusión.

Atentamente,

Comisión Organizadora del Club de Corredores.”

Fuente: https://traileros.ar/